La barra llegó 3 días después de su fecha inicial de entrega. Además, tuvimos la sorpresa de tener que pagar 45,88€ más de impuestos de Aduana si la queríamos. Abrimos la caja y la decepción fué subiendo de tono. Se trata de una barra que prácticamente no pesa nada, parece un juguete más que un aparato electrónico y tiene el mando a distancia en chino. Difícil de instalar porque tuvimos probar todos los botones para acertar con el modo adecuado. Cada vez que se pulsa un botón, se oye una frase en chino que no se puede desactivar. El sonido es francamente malo, tanto en los graves como en los agudos. Por el mismo precio, se puede comprar una muy superior en España. NO MERECE LA PENA COMPRARLA.
la barra no suena tanto como esperaba. La envían desde Malasia y tuve que pagar 50 euros más de aduana. El L 3 no se puede colgar no tiene espacio para los cables y la conexión del cable óptico no es muy fiable